martes, 29 de diciembre de 2009

Tortilla Española (perdón, Estatal)











Me recomendaron hace unos días que leyera en un suplemento dominical el comentario que se hacía sobre un concurso gastronómico celebrado en Alicante.


Lo voy a resumir. Pues sí, en esa tierra levantina ha tenido lugar un concurso de TORTILLAS DE PATATAS. No debe ser la primera ocasión que se ha celebrado pero sí que lo hayan ganado los cocineros de un bar de Bilbao (perdón de Bilbo).


El señor hizo la tortilla más sabrosa y con toda seguridad ha sido el justo vencedor, pero lo mejor viene ahora y ha sido el cartel que le acredita para su bar izaro de Bilbao (perdón, Bilbo) Vizcaya (perdón, Bizkaia) haber conseguido el triunfo. Dice así: «2009 Primer Premio de Tortilla Estatal», supongo que lo de “estatal” debe ser por aquello de que a la tortilla de patatas siempre se la conoció como “tortilla española” y no fuera a ser que algún vasco se ofendiera al leer la palabra ESPAÑOLA (perdón, Estatal).


Son curiosos los malabares que hacen la mayoría de los vascos para eludir decir o escribir la palabra ESPAÑA. Para ellos el resto de españoles (perdón, estatales) nos hemos quedado reducidos a ser miembros del Estado.


Jamás y doy fe de ello, en la TV autonómica radios o publicaciones, incluidos los políticos de turnos, dicen España (perdón, Estado) salvo para pedir más o criticar que les han dado menos pasta de la que pedían. Para todo lo demás ESPAÑA (perdón, Estado) no existe. Incluso suelen decir que tal acontecimiento se celebrará a las 14 horas, hora oficial de Euskadi.


En fin, el cartelito no tiene desperdicio y es el colmo de la tontez humana.


Y según se seguía leyendo en el suplemento hay que llegar a la conclusión de que la cursilería y gilipollez no tiene límites; nada como un nacionalista para hacer el ridículo impunemente, por no atreverse a presumir de ser el mejor tortillero de España (perdón. Estado) y así sentirse como el más genuino e inmaculado descendiente de D. Sabino Arana. Porque aquí el objetivo es doble, negarse a llamar “española” (perdón estatal) o evitar escribir el nombre de “España” (perdón, Estado) como ámbito geográfico en el que se ha desarrollado el campeonato. De seguir así, le cambiaremos el nombre a muchas cosas más. Cantaremos la canción de Cecilia diciendo «Mi querido Estado, este Estado mío, este Estado nuestro…», entonaremos la publicidad de las aceitunas de mesa cantando «Es la Estatal una aceituna como ninguna…» o cantaremos « la Estatal cuando besa es que besa de verdad…»


¡Coño! ¡Qué tontos son algunos!























6 comentarios:

paco dice...

saludos fernando, es la primera vez que entro a tu blog, lo hago a traves del de julia, la verdad es que me ha gustado y no será la ultima vez que te visito, respecto a la tortilla española+estatal, debo decirte que yó estuve alli cuando las estaban haciendo, y mi opinión es que tú las haces mejor, daban pena verlas....un cordial saludo de un crevillentino+alicantino+valenciano+español+estatalista, pero sobre todo creo que algo de socialista+internacionalista.paco

Elena dice...

Pues sí que hay mucho gilipollas por este país llamado España, por mucho que les moleste a nacionalistas y progres.

Lo de la tortilla estatal es para enmarcarlo y colgar el cuadro en el museo de las tonterías.

Estupenda entrada Fernando.
Un beso.

Fernando dice...

Gracias, Paco, por tu visita. Sé bienvenido y abiertas tienes estas puertas para lo que quieras.

Te había visto en el cuaderno de Julia y ya he comprobado tus aficiones culinarias.

Me agrada coincidir contigo en lo dices que te sientes español y amante de tu patria chica. Afortunadamente en en esos conceptos coincidimos casi todos. Allá los que se desmarcan.

Un abrazo y hasta la próxima.

Fernando dice...

Gracias, Elena, por tu visita. Siempre tan generosa.

Y ¿qué podemos hacer contra los gilipollas? pues me temo que poco. Allá ellos y sus cosas.

Van todo el día sacando pecho y pregonando las bobadas aprendidas de D. Sabino a todos los vientos, sin darse cuenta del habitual ridíoculo que hacen. Pero como digo antes, allá ellos y sus cosas.

Y lo mejor del todo, es que la tortilla española de patatas, parece ser que la inventaron durante el asedio de Bilbao los carlistas. Tenían prisa por continuar el combate y mezclaron los huevos con las patatas para tardar menos tiempo. En fin, los hay que no se enteran.

Bueno, Estatala (supongo que así será el femenino) y Cordobesa, un cariñoso saludo y un abrazo de otro Estatal y Castellano.

Palmira dice...

Estoy muy de acuerdo contigo Fernando, la estupidez con los nacionalismos se ha convertido en payasada grotesca, ¿no fue Benach, presidente del Parlamento catalán el que pidió un intérprete catalán castellano para hablar con un representante del gobierno de Nicaragua?, ¿qué palabras no podría entender?, encima claro, gasta dinero de las arcas del estado catalán para hacer el imbécil

Fernando dice...

¿Qué puedo decir , Palmira, que esté en desacuerdo con lo que acabas de escribir? Pues nada.

Estoy totalmente de acuerdo contigo y seguimos soportando, no sé hasta cuando, las tonterias, siempre muy caras, como bien nos recuerdas, de los imbéciles nacionalistas.

¿Acabará esta pesadilla política nacionalista alguna vez? No sé.

Gracias por participar.

Un abrazo.