LIBERTAD

Grandilocuente concepto: «LIBERTAD» Se nos llena la boca al nombrarla, sentimos que se rompen las cadenas cuando soñamos en alcanzarla, pero hasta donde sé, nadie es libre, ni siquiera los que presumen o intentan serlo. Solo disfrutamos de algunos momentos y no muchos, de ella.

Es curioso comprobar donde algunos colocan su irreal sueño del concepto que tienen sobre la libertad. Creen, eso dicen, que es el bien más sagrado de los humanos, lo máximo en lo que se puede soñar y alcanzar. Incluso se atreven decir que está por encima de cualquier creencia y riqueza (se olvidadon, supongo que intencionadamente, añadir igualmente pobreza) Todo sería perfecto y deseable sino fueran ellos y todos, esclavos de si mismos y de los poderosos, que a su vez lo son también de otros más importantes. La libertad no existe, es pura quimera, es un maravilloso sueño y nada más.

¡LIBERTAD! Qué bonita palabra, qué bien suena, qué bien queda escrita. Algunos, se debieron sentir satisfechos e iluminados por alguna diosa celestial, mientras adoraban y escribían sobre ese sueño.

Recuerdo a un periodista sevillano, con nombre y apellido inequívocamente judíos, que ahora mismo no recuerdo, leerle en el Correo de Andalucía, cuando un día nos hacía desayunar, diciéndonos que toda la ciudad debería estar feliz y contenta, porque ¡por fin! no sé qué obra iban a hacer en el Teatro de la Maestranza que iba a favorecer a "toda" la ciudadanía hispalense.

Ante semejante memez no pude por menos que escribirle una carta recordándole que efectivamente TODO Sevilla y todos los sevillanos y forasteros aquella noche durmieron más felices que nunca y que en todos los barrios, chabolistas incluidos, salieron a festejar la buena nueva del teatro y que con ello, ya no importaban ninguno de los problemas de los miles de marginados, viviendo en auténtica miseria, que hay en la capital andaluza. Qué lamentable y es que siempre, como ese nada espabilado periodista, creyendo que solo existen ellos y los suyos y que si miran alrededor y ven a los “otros”, a los que no gusta ver, siempre se justificarán creyendo y diciendo, que ellos se lo han buscado y además como así son “supuestamente” más felices ¡qué se fastidien y espabilen! y se busquen las habichuelas como puedan. Pues a esos, a esas dignas personas, algunos por ahí, son a les dan consejos diciéndoles que la Libertad está por encima de sus miserias y hambres y que deben luchar, en primer lugar no por dar de comer a los suyos, lo deben hacer por LA LIBERTAD que es el bien prioritario.

La Libertad, decís, está por encima de todo, incluso de la riqueza y subsistencia diaria. Pero... ¿A qué riqueza os referís? ¿De qué ricos habláis? ¿Habéis excluido a los pobres por serlo? ¿Libertad sólo para ricos? ¿Por qué no le dicen eso mismo a una familia que no tiene para comer hoy? “No os preocupéis, le deberíais decir con paternalismo barato, no tenéis que comer pero sois libres y eso es más importante” “Fijaros si sois libres que podéis caminar sin que nadie os diga nada, por la acera derecha o izquierda y tampoco os impedirán que podáis comprar la barra de pan en la panadería Julita, Juanito o la de Luisito ¿De qué os quejais? ¿Acaso no sois libres? Eso es lo importante, lo demás, son bobadas insignificantes.

Estoy harto de que nos vendan soluciones, conceptos, ideas, siempre pensando desde su cómoda posición social y económica y jamás se pongan a pensar y buscar soluciones desde y para la marginación, la suciedad, la convivencia con ratas, desde el hambre…porque existir existe y va a seguir existiendo mientras a ellos jamás les faltará el qué comer, ni pasarán frío en sus casas como los de las chabolas. Pero, acaso… ¿no son libres? Entonces que se aguanten que ya se han encargado desde el capitalismo, sucedáneos y palmeros darles esa libertad para que de una vez por todas sean libres y a la vez más esclavos que nunca de ellos.

Al viejo dicho que el dinero no la felicidad, ahora hay que añadir que efectivamente no la da pero como la libertad está por encima de nuestras riquezas… En fin, me contengo y no sigo, me quedo aquí.

Siempre hay frases que los poderosos se inventan para justificar sus injustificables poderes y riquezas. Es famosa la que antes menciono del dinero y que jamás se la escuché decir a ningún pobre. Me quedaré sentado de nuevo esperando a que otro desheredado de la vida me haga el comentario que para él es más importante la libertad que le supone poder caminar un rato a pie y otro andando a que hoy le pudieran cerrar el comedor gratuito de Cáritas a donde efectivamente llega con total libertad y mientras camina, puede tatarear, en total independencia un pasodoble y después un bolero.

¡Quedaros con vuestra Libertad! y seguid predicando desde púlpitos y foros abarrotados de fieles, vuestros fracasos y vuestra incompetencia para mejorar a los desheredados, mientras otros, muy pocos en el mundo, es cierto, luchan sobre todo, por la dignidad de las personas humanas y precisamente por ello, son el centro de vuestras criticas e iras. Nunca jamás olvidéis que la LIBERTAD se alcanzará desde la cultura y el comer todos los días, no al revés.